EL 2 DE ABRIL LLEGA "(SEGISMUNDO) VIDA O SUEÑO"

(SEGISMUNDO) vida o sueño de Guillermo Farisco


"todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona"

SÁBADOS 22.30 HS. en LA RATONERA CULTURAL
Avenida Corrientes 5552
(entre Serrano y Gurruchaga)
Reservas: info@laratonera.com.ar - www.laratonera.com.ar

Localidades: $30.- Est. y Jub: $25.-

FICHA TÉCNICA
Actúan: Andrés Fraire, Marina Caracciolo, Guillermo Farisco
Escenografía, vestuario: Patricia Blanco
Asistente de dirección: Romina Gaitán
Coordinador de sala: Fernando Cipolla
Fotos: Romi Faiad - Pau Herrera
Prensa: Medioshábiles Comunicación
Dramaturgia y dirección: Guillermo Farisco

SINOPSIS ARGUMENTAL
Finales de la década del ’60. El Dr. Atkinson (Guillermo Farisco), médico psiquiatra allegado al gobierno de facto de Onganía, ante el temor por el avance de las expresiones de libertad en el mundo, decide crear una droga que sirva para anular, en la gente, la capacidad de pensar. Para obtener esa droga necesita extraer una sustancia directamente de un cerebro humano vivo, y para eso se vale de Raimundo (Andrés Fraire), un enfermo mental con desdoblamiento de personalidad quien cree ser Segismundo, el protagonista de "LA VIDA ES SUEÑO" de Calderón de la Barca, manifestando que sueña pero pronto despertará a una realidad mejor.
Para el cuidado y control de Raimundo pone a cargo a la enfermera Potkinson (Marina Caracciolo), una mujer limitada y frívola quien irá modificando su personalidad hasta casi fusionarse con la de Raimundo. Ambos serán víctimas del Dr. Atkinson y de un plan sistemático que quiso cercenar los sueños y la libertad de todas las personas.

ACERCA DE LA OBRA
Como a tantos argentinos que hemos padecido la represión de la última dictadura militar, han dado vueltas por mi cabeza montones de fantasmas, ilusiones, historias, miedos y angustias. Y en medio de esas sensaciones aparecieron también el cómo se llegó a ese horror, cuáles fueron los umbrales de tan caóticas épocas.
Sabemos que las clases dirigentes junto con los poderes económicos y gran parte de la sociedad contribuyeron para que esto pasara. La década del 60 fue en todo el mundo el explotar del cambio, la juventud contestataria, el deseo de un mundo mejor, el terminar con injusticias instauradas desde siglos, y nuestro país no podía estar ajeno a eso. Ante el reclamo de un mundo mejor, empiezan a aparecer los chacales para oscurecer la historia. La dictadura de Onganía y sus seguidores con aparente tranquilidad social y bienestar para todos dejan sucesos tremendos como la noche de los bastones largos, por mencionar tan solo uno.
Y aquí aparece en mi cabeza Segismundo; inspirándome en el personaje de Calderón de la Barca, bellísima obra del siglo de oro español, donde se expone la temática del existencialismo y envuelta en la poética del límite entre la realidad y el sueño.
(SEGISMUNDO) vida o sueño, es el proyecto siniestro de un médico mesiánico amparado y apoyado por el gobierno de facto de esa época y que pretende controlar a la gente para que no se subleven al orden establecido. Fantasía sí, pero tal vez no han estado tan lejos todos estos viles poderosos de querer un mundo así, donde la gente no piense, donde nuestros ideales queden truncos, donde nuestra capacidad de expresión, nuestros derechos, nuestros sueños sean controlados.
Lo que pasó, pasó. Y lo importante es que todavía hoy a más de treinta años tengamos la posibilidad y la suerte de expresarnos, sentir e imaginar estas obras de teatro para que nunca puedan convertirse en una realidad.

ACERCA DEL AUTOR
Guillermo Farisco nació en Buenos Aires. Es egresado de la EMAD (Escuela Metropolitana de Arte Dramático) y tiene 30 años de trayectoria como actor, trabajando en obras como La lección de anatomía, Jesucristo Superstar, Las Troyanas, El Fantasma de Canterville, entre otras muchas obras.
Como dramaturgo fue ganador del 2º premio por obra inédita de Fondo Nacional de las Artes por su pieza “PODRIDA”. También son de autoría “CRÍMENES REGLAMENTARIOS”, “LA MADRESELVA” y, como autor y director realizo la “NECESIDAD DE ELEFANTE”, “SEGISMUNDO, VIDA O SUEÑO”, “ALMAS ROÑOSAS” y “DESENCAJADOS”, su última puesta en 2010 que se mantuvo durante 4 meses en cartelera. Después de en el campo para niños estrenó varias obras de títeres (los cuales son realización de él mismo) y tres musicales: “LA RANA Y EL PRÍNCIPE”, “EL SASTRECILLO VALIENTE” (Ambas adaptaciones de los cuentos clásicos) y desde el 2002 trabaja con la Fundación del Quemado Fortunato Benaím, con su obra “UN AMOR CAVERNÍCOLA” que se exhibe en las escuelas primarias de la Ciudad de Buenos Aires y ha sido llevada también al interior del país. Tiene algunos trabajos realizados en TV, Cine y publicidad para Argentina y otros países. Comenzó su carrera como dramaturgo compartiendo la autoría de dos obras: “PARA COMERTE MEJOR, UN PROGRAMA PARA METERSE EN LA BOCA DEL LOBO” y “1223 DH” con la actriz Marcela Fernández.